Cómo asar castañas y que se pelen bien
Trucos de cocina
Trucos infalibles para que las castañas te queden tiernas y fáciles de pelar
¡Me encanta esta época del año! Cuando llega el frío y las calles se inundan con el olor tan familiar de las castañas asadas. Aunque su precio no me permite disfrutarlas de los puestitos en la calle tanto como me gustaría. Una opción a la que recurro cada año, práctica y económica, es hacerlas yo misma en casa (al horno, freidora o sartén. En microondas no te recomiendo).
Pero todas sabemos que asar castañas puede convertirse en un pequeño drama, sobre todo si es la primera vez que nos aventuramos a hacerlas nosotras mismas. Se pueden quemar, quedar duras o, peor aún, ¡cuando la piel no sale ni con pinzas! Si te ha pasado alguna vez como a mí, tranquila, te traigo la solución. Nada como el prueba y error para aprender. ;)
Si algo he aprendido es que asar las castañas y que queden perfectas no es cuestión de suerte, sino de saber algunos trucos clave. Te traigo el cómo hacerlas paso a paso, tanto al horno como en sartén o en freidora de aire, para que te queden tiernas por dentro, doradas por fuera y ¡que se pelen sin problema!
Y sí, también te dejo con algunos consejos para conservarlas si haces de más. Porque una buena tanda de castañas asadas, la verdad es que dura poco… pero mejor que, si por casualidad sobra alguna, se mantenga bien tierna y no se reseque.
Cómo preparar las castañas antes de asarlas
Antes de pensar en el horno o la sartén, hay un paso que marca la diferencia sea el método que sea en las que las cocinemos: prepararlas bien. Parece simple y obvio, pero de verdad, hazme caso que es imprescindible esta previa.
- Elige las castañas adecuadas: Busca castañas grandes, duras y sin agujeros ni grietas. Cuanto más frescas, ¡mejor se pelarán!
- Lávalas bien para eliminar restos de tierra, seguridad, ante todo.
- Haz un corte en la piel: Con un cuchillo afilado, haz un corte superficial en forma de cruz o una línea lateral. Este paso es imprescindible para que no exploten durante el asado, pero también ayudará a que la piel salga mucho mejor.
- Remójalas antes de asar: Déjalas reposar en agua templada durante unos 10-15 minutos. Este truco tan sencillo ablandará la piel y hará que sea muchísimo más sencillo el pelarlas después.
Retira las castañas que observes que tienen agujeros o las que se hundan en el agua al lavarlas, suelen estar dañadas o con gusano. Las mejores para asar son las castañas frescas de temporada, las que se recogen entre octubre y diciembre.
Cómo asar castañas
Una vez listas, ¡toca cocinarlas! Las puedes hacer cocidas, en puré o crema, pero en esta ocasión me centraré en asarlas con tres métodos diferentes: al horno, freidora de aire y en la sartén. Te dejo los tiempos y temperaturas para que te queden perfectas.
Cómo asar castañas en el horno
El método más tradicional y limpio. Es especialmente útil para cuando quieres preparar una buena cantidad de castañas al entrar más.
- Precalienta el horno a 200°C con calor arriba y abajo.
- Coloca las castañas en una bandeja con el corte hacia arriba (sin amontonarlas).
- Hornéalas durante 20-25 minutos. Remuévelas a mitad de cocción para que se doren por todos lados.
- Cúbrelas al sacarlas con un paño limpio o mételas en un bol tapado unos 5 minutos. El vapor que sueltan ayudará que la piel se despegue más fácilmente.
Si las notas secas al sacarlas del horno, siempre puedes rociarlas con un poco de agua antes de taparlas con el paño. En ese pequeño reposo, el agua y el vapor ayudarán a que recuperen su jugosidad al instante.
Cómo asar castañas en sartén
Si no tienes horno o te apetece algo más rápido, ¡la sartén es una muy buena opción! Quedan genial, además.
- Usa una sartén gruesa o, si tienes, de agujeros (como las típicas para castañas). Yo las suelo hacer en una sartén gruesa y quedan muy bien.
- Calienta la sartén a fuego medio y añade las castañas con el corte y el remojo ya hechos.
- Mueve cada pocos minutos para que no se quemen y se doren de manera uniforme.
- Estarán listas en unos 15-20 minutos, la piel debe quedar tostada y desprenderse con facilidad.
Al sacarlas, envuélvelas también en un paño durante unos minutos. Este truco del vapor es universal, por lo que ves. Da igual el método, el secreto está en dejarlas sudar un poco antes de pelarlas.
Cómo asar castañas en freidora de aire
Hacer las castañas en freidora de aire es de lo rápido y limpio. Eso sí, siempre que hagamos poca cantidad de castañas, sino tendremos que preparar varias tandas.
- Haz el corte en las castañas y remójalas como para las anteriores.
- Precalienta la freidora de aire a 180°C durante 3 minutos.
- Coloca las castañas en la cesta (sin amontonarlas, importante) y cocínalas entre 10 y 12 minutos.
- Agítalas a mitad del tiempo para que se asen por todos lados por igual.
Cuando las saques, de la misma manera que hacemos con los otros métodos, en mismo truco: tápalas un par de minutos con un paño húmedo y verás cómo la piel se despega sola.
Trucos para que se pelen bien
Aunque el método de cocción influye, como ves, hay tres patrones que siempre se repiten. Son trucos que siempre funcionan en cualquiera de los casos, así que recuerda:
- Haz un buen corte antes de asarlas. Si no, el vapor queda dentro y las pieles se pegan. Incluso pueden darnos un buen susto al explotar.
- El remojo previo a cocinarlas es clave. Hidrata la piel y la ablanda, ¡así que no te lo saltes!
- Tapa las castañas recién asadas unos minutos para crear ese efecto de vapor que hace que la piel salga mucho más fácil. Hay que hacer sudar a las castañas.
- (Truco extra) Pélalas a poder ser siempre en caliente (con cuidado de no quemarte). Una vez se enfrían, la piel se endurece de nuevo y será mucho más difícil de despegar.
Si tienes muchas castañas por pelar, puedes pelarlas mientras aún están templadas y guardarlas después en un recipiente hermético para comerlas más adelante.
Cómo conservar las castañas asadas
Si te han sobrado (algo difícil, pero posible… ;) ), hay varias formas de conservarlas, no te preocupes:
- En la nevera hasta 3 días: Guárdalas en un recipiente cerrado. Para recalentarlas, basta con unos segundos en microondas o en la freidora de aire.
- Congeladas (ya asadas) hasta 6 meses: Pela las castañas y congélalas en bolsas o recipientes con cierre hermético. Para usarlas, solo tienes que calentarlas directamente sin descongelarlas y listo.
- Aprovechar para hacerlas en almíbar o puré: Entre las mejores recetas de aprovechamiento estas dos opciones resultan deliciosa para postres o cremas.