El truco para hacer tortilla de patata sin aceite
Cocina sana
Haz una tortilla de patata jugosa, sabrosa y más saludable sin apenas aceite con este truco fácil que cambiará tu forma de cocinarla

Hacer una tortilla de patatas sin freír sus ingredientes en aceite y que, además, quede buena parece imposible, pero… ¿y si te decimos que existe un truco con el que lo conseguimos? Lo mejor es que no necesitarás ni la freidora de aire ni el microondas para hacerlo, los cuales pueden secar el resultado final.
Todas sabemos que una buena tortilla de patatas tradicional supone abrir el aceite y usarlo generosamente. Además del precio de este, todo este aceite también supone que las patatas, al freírlas en él lentamente, lo absorberán, no sólo haciendo que la tortilla quede más sabrosa, sino que también haciéndola mucho más calórica.
Después de investigar mucho y poner a prueba varios trucos, hemos dado con el método para conseguir una textura muy parecida a la tortilla tradicional con casi nada de aceite. Queda riquísima, es muy rápida de hacer y, lo mejor, resulta mucho más ligera que la original. Solo necesitarás cambiar un poco el paso a paso y, eso sí, ganas de probar algo distinto, claro. ¡Mente abierta! ;)
Truco para hacer una tortilla sin aceite
Ni freidora de aire, ni microondas, la clave está en cocer las patatas en agua con un toque de vinagre para que luego la tortilla quede sabrosa y jugosa por igual. Este sencillo cambio en la elaboración tradicional cambia por completo el resultado: las patatas se ablandan conservando su forma y no absorben aceite, haciendo que el resultado sea mucho más ligero y sano.
Como extra, siempre nos encanta mencionar que se ensucia mucho menos al no salpicar el aceite.
Ingredientes para una tortilla más ligera
Realmente, ya ves que no necesitas nada raro. Sólo agregamos un chorrito de vinagre a los ingredientes de la receta tradicional ¡y listo!
- 3 patatas grandes
- 6 huevos
- 1 cebolla (opcional, pero recomendada)
- 1 cucharada de vinagre blanco
- Aceite de oliva (solo una cucharada)
- Sal
Este truco funciona tanto con cebolla como sin ella, así que no entremos ahora mismo en el clásico debate de si es mejor la tortilla de patata con o sin cebolla. ;) (Nosotras somos del team con cebolla siempre)
Cómo hacer una tortilla de patata sin aceite
Prepara, además de la sartén para tortilla de patata, una olla suficientemente grande en la cocer las patatas. ¡Vamos allá!
- Pela y corta las patatas como siempre, en dados pequeños o en rodajas finas, como gustes. Cuanto más pequeñas, recuerda que más rápido se cocerán.
- Para las patatas cortadas a una olla con agua. Agrega una cucharada de vinagre blanco (ayuda a que mantengan la forma sin volverse un puré) y cuécelas alrededor de 10 o 12 minutos. Es importante que queden blandas, pero no deshechas.
- Una vez cocidas, déjalas reposar unos minutos en un colador para que suelten toda el agua posible. Puedes darles un toque de sal mientras están en el colador.
- En una sartén, agrega tan solo una cucharada de aceite (¡no hará falta más!) y añade la cebolla picada si vas a usarla. Cuando esté transparente y comience a dorarse, incorpora las patatas a la sartén y, como ya están cocinadas, solo tendrás que darles un salteado rápido. Con esto conseguimos un punto dorado y un sabor más cercano al de la tortilla clásica.
- Bate los huevos en un bol grande, añade las patatas y mezcla bien. Ajusta la sal al gusto y deja reposar 20 minutos.
- Vuelca la mezcla en la sartén caliente engrasada con una gotita de aceite, lo mínimo. Deja cuajar la tortilla a fuego medio-bajo 1 o 2 minutos antes de darle la vuelta y dorarla el mismo tiempo por el otro lado, dependiendo de lo cuajada que te guste. ¡Y listo!

¿Queda realmente como la original?
Sorprendentemente, ¡queda muy similar! Incluso diríamos que en ciertos aspectos mejor, sin el olor a fritanga o el exceso de grasa.
La tortilla que conseguimos con las patatas cocidas es más suave, con las patatas bien integradas y sin la pesadez del aceite. Obviamente, no sabrá exactamente igual que una tortilla frita en litro y medio de aceite, pero está muy cerca y, la verdad, es que resulta deliciosa e igualmente jugosa. Y si lo que quieres es comer más ligero o evitar frituras, a nosotras, desde luego, nos parece una opción perfecta.