Receta práctica
Cómo hacer arroz blanco (guía completa)
Una guía con tiempos de cocción, trucos para que quede suelto y consejos para hacer las mejores ensaladas y salteados

Os vamos a enseñar cómo hacer arroz blanco para servir como guarnición. Hemos utilizado arroz redondo (tipo bomba), tenedlo en cuenta porque la elaboración de cada tipo de arroz es distinta.
El arroz blanco es uno de los acompañamientos más versátiles y presentes en la gastronomía mundial. Desde platos asiáticos, hasta guisos latinos o mediterráneos, este cereal ha sido una base esencial en todo tipo de culturas durante siglos.
Cocinarlo de manera adecuada se considera una habilidad básica en la cocina, pero debemos decir que también tiene su truco. Un arroz bien cocido, suelto y en su punto puede marcar la diferencia y transformar cualquier receta simple en un plato irresistible.
Debemos saber que no todos los tipos de arroz se cocinan igual. Hay muchas variedades: largo, redondo, basmati, jazmín, integral... Y cada uno de ellos con sus propias características y particularidades. En esta receta nos enfocamos en el arroz redondo, un tipo de grano más corto y grueso, que absorbe mejor el sabor de los líquidos y tiene una textura más tierna, lo que lo hace ideal para servirlo como guarnición en platos de carne, pescado o verduras.
Índice de contenidos
Ingredientes

-
100 gramos de arroz redondo
-
400 mililitros de agua
-
1 cucharadita de sal
Raciones
1
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
5 m
Cocinado
20 m
Tiempo total
25 m
Informacion nutricional
Valor nutricional (*por ración)
Cantidad | % | |
---|---|---|
Energía | 327 kcal | 16,35% |
Proteína | 8 g | 10,67% |
Hidratos de carbono | 73,41 g | 26,69% |
Azúcares | 0,05 g | 0,1% |
Grasa total | 2,20 g | 2,82% |
Grasa saturada | 0,42 g | 2,3% |
Grasa polisaturada | 0,27 g | 2,45% |
Grasa monosaturada | 0,30 g | 0,68% |
Fibra | 2,8 g | 9,33% |
Sal | 1,8 g | 36% |
Sodio | 0,01 g | 0% |
Calcio | 20 mg | 1,67% |
Yodo | 22 mcg | 14,67% |
Hierro (hombres) | 2 mg | 20% |
Hierro (mujeres) | 2 mg | 11,11% |
Paso a paso
Lavamos 100 g de arroz blanco redondo debajo del grifo 3 veces, hasta que el agua esté limpia. Utilizamos un colador fino para que no se pierdan los granos.
Este paso es más importante de lo que parece para quitar el almidón, conseguir un arroz suelto y evitar que quede pegajoso al cocerlo. Si el agua sigue saliendo turbia después de los tres lavados, siempre podemos repetir una o dos veces más hasta que el agua salga clara.

Hervimos en un cazo 400 ml de agua con 1 cucharadita de sal y cuando rompa a ebullición, echamos el arroz.
Es recomendable usar una sal fina para que se disuelva más rápidamente.

Bajamos el fuego a una intensidad media-baja, lo justo para mantener una cocción constante pero suave, removemos para que el arroz no se apelmace y hervimos (sin tapar) durante 16-18 minutos, el tiempo indicado en el paquete. El arroz quedará después de estos minutos seco en el cazo y listo para comer.
Removemos ligeramente durante los primeros minutos con una cuchara, solo una o dos veces, para asegurarnos de que los granos no se apelmacen ni se peguen entre sí. Es importante no remover en exceso, ya que podría liberar más almidón y hacer que la textura resulte más pegajosa.

durante unos 16-18 minutos, dependiendo del tipo exacto de arroz redondo que estemos usando y del punto de cocción que deseemos. Durante la cocción, el agua se irá evaporando poco a poco y el arroz absorberá el líquido. Sabremos que está listo cuando ya no quede agua visible en el fondo y los granos tengan una textura firme pero cocida. En ese momento, retiramos del fuego y dejamos reposar un par de minutos antes de servir, para que los granos terminen de asentarse. El resultado será un arroz seco, en su punto, ideal para acompañar cualquier plato principal.

Consejos y trucos
Una vez cocinado, si vamos a usarlo para preparar una ensalada de arroz, lo pasamos por debajo del grifo de agua fría para que el grano quede más suelto.
Si queremos saltearlo, calentamos aceite o mantequilla en una sartén y añadimos el arroz una vez listo.
La cantidad de agua es precisa. En este caso, agregamos una proporción de 4 partes de agua por 1 de arroz, proporción que funciona bien con el arroz redondo. Si cambias de variedad de arroz, deberás ajustar dichas cantidades. Por ejemplo, el arroz largo suele necesitar menos agua.
Muchas recetas de arroz largo recomiendan cocinarlo tapado, no obstante, en el caso del arroz redondo cocido para guarnición, es mejor cocinarlo sin tapa ya que permite que el vapor se libere y el arroz quede más seco, con el resultado ideal para servir junto a otros platos sin que se apelmace.
Si has cocinado arroz de más, bien puedes guardarlo en la nevera o congelar el arroz. Una vez enfriado por completo, guárdalo en un recipiente hermético en la nevera por un máximo 3 días, aunque es mejor consumirlo en las siguientes 24 horas de cocerlo.
Para recalentarlo, puedes usar el microondas. Agrégale una cucharada de agua al arroz para devolverle algo de humedad. También puedes saltearlo directamente en una sartén con un poco de aceite para que quede más suelto y sabroso.
¡Aquí van algunas ideas de cómo puedes utilizar y aprovechar este arroz blanco!
- Ensaladas frías : Añade atún, huevo duro, maíz, aceitunas y un chorrito de aceite de oliva para preparar una ensalada veraniega rápida, completa y nutritiva.
- Arroz tres delicias : Usa el arroz ya cocido para hacer un clásico arroz frito al estilo asiático con huevo, jamón cocido, guisantes y salsa de soja. ¡Nunca falla!
- Como guarnición especiada: Puedes añadir un toque de laurel, ajo o incluso una pizca de cúrcuma o comino en el agua de cocción para darle un sabor diferente al arroz.
- Plato principal vegano: Añade legumbres como lentejas o garbanzos cocidos y saltea con verduras para una comida completa, nutritiva y sin carne. Los garbanzos con arroz o lentejas con arroz son platos saciantes, sanos y nutritivos.