¿Sabes de qué está hecha la gelatina?
¿Es cierto que la gelatina está hecha de hueso?

Quién no se ha preguntado alguna vez, ¿con qué se hace la gelatina? Tan común es esta pregunta, que existen mitos sobre su origen y los ingredientes con la que se elabora ¡que hemos venido aquí a resolverlos!
Se trata de un postre muy común y popular que nos ha venido acompañando desde nuestra tierna infancia. Su textura suave y blanda la hace ideal para los niños pequeños o los mayores que ya tienen más problemas para tragar y pueden tender a atragantarse.
Seguro que os sorprendería saber en todas las preparaciones en las que se utiliza este ingrediente y es que más allá de la gelatina en plato o bote de yogur como suele comercializarse, también es un habitual en recetas que deben tener cierta consistencia, como la tartas de queso sin horno que tanto nos gusta a todos.
La gelatina, incluso, está presente en las cápsulas de algunos medicamentos y hasta en objetos tan comunes como el papel de fotografía. ¿Lo sabías? A nosotros desde luego nos ha sorprendido, ¡y mucho!
Dentro de todas sus particularidades, destacamos también que es un ingrediente que aporta nutrientes muy interesantes, a la vez que su contenido de calorías es muy bajo. De hecho, la gelatina es recomendada para incluir en nuestra dieta.
Ahora, volvemos a la pregunta original que nos ha traído aquí, ¿de qué está hecha la gelatina?
Composición y origen de la gelatina
La gelatina está compuesta principalmente por proteína de colágeno. De hecho, ésta supone entre el 78% y el 90% de su composición, siendo entre el 1% y el 2,5% del restante sales minerales y todo el resto agua.
Como veis, la gelatina está compuesta por muy pocos ingredientes. Sin embargo, debemos tener en cuenta que muchas veces se les añade azúcar, edulcorantes o saborizantes. Así como, colorantes alimenticos o zumos de frutas naturales que son los que le dan esos colores tan llamativos y característicos a la gelatina.

Ahora nos entra una duda, ¿qué es el colágeno? ¡Vamos a ver qué es este compuesto de la gelatina!
El colágeno es una proteína animal presente en el tejido conjuntivo de gran parte de los animales, ¡humanos incluidos! Se encuentra concretamente en los huesos, los tendones, los cartílagos y en la misma piel. Es, de hecho, el responsable de darnos la elasticidad y la resistencia a estas partes.
Antes os decíamos que resulta muy interesante para la gente mayor por su textura, pues más allá de esto, la gelatina también es muy beneficiosa para la salud por el hecho de aportarnos colágeno.
A medida que envejecemos, nuestra cantidad de colágena va reduciendo. Es fácilmente visible en hechos como las arrugas o los problemas de articulaciones. Esto mismo, hace que sea muy recomendable el tomar colágeno de forma de suplemento o alimentos conforme nos hacemos mayores.
Dicho esto, y sabiendo dónde está presente el colágeno, queda una duda por resolver: ¿La gelatina está hecha con huesos?
¿Es verdad que la gelatina está hecha de hueso?
La gelatina proviene, efectivamente, de los animales y es por esto, que los veganos no la consumen.
Se extrae de dónde os hemos puntualizado que se encuentra: de los huesos, los cartílagos, la piel, los tendones y hasta los cartílagos de diversos animales. Generalmente, provienen del ganado vacuno, porcino, avícola (pollos y pavos) y equino (caballos).
Para los más curiosos, más abajo en el texto, en proceso de elaboración de la gelatina os explicamos cómo se extrae el colágeno y cómo se hace la gelatina. ;)
Existen también otros tipos de gelatinas de origen vegetal, aunque sería más correcto referirnos a ellas como espesantes. Os lo explicamos en el siguiente punto dónde hablamos de los tipos de gelatina y su composición.
Tipos de gelatinas y su composición
Como os comentábamos, la gelatina común se extrae del colágeno animal, sin embargo, existen hasta tres tipos que se distinguen entre sí, precisamente, por su origen:
- Gelatina de origen animal
- Gelatina de origen vegetal
- Gelatina compuesta por azúcares múltiples

La gelatina de origen animal proviene, como os comentábamos, de los huesos, cartílagos y tejido conjuntivo de los animales. Dentro de este tipo distinguimos la gelatina en láminas y la gelatina en polvo.
La gelatina en polvo puede ser tanto neutra, como de sabores; mientras que la gelatina en láminas, también conocida como cola de pescado, siempre es de sabor neutro. La primera suele ser común su uso como estabilizante de la nata montada, gelatinas de frutas, mousse... Y la segunda se integran primero en un líquido caliente como en la tarta de queso sin horno.
La gelatina de origen vegetal es muy saludable y posee un gran poder gelificante. Entre los más comunes encontramos:
- Agar agar proveniente de las algas.
- Pectina presente en las cáscaras de muchas frutas y verduras.
- Harina de konjac que se extrae de la raíz de un tubérculo del mismo nombre.
- Carragenina que proviene de las algas marinas rojas.
Éstas son una excelente opción para los veganos y vegetarianos que no consumen productos de origen animal. Además, este tipo de gelatinas suelen tener una capacidad gelificante superior al tipo de gelatina de origen animal.
Las gelatinas de azúcares múltiples son los menos recomendables, ya que se componen principalmente de hidratos de carbono de absorción rápida, como el azúcar refinado.
Su aporte de proteínas es muy bajo, suponiendo tan sólo entre el 1% y el 12% de composición. Asimismo, dentro de todas sus variedades y marcas que las elaboran, pueden contener también ingredientes de origen animal y vegetal.
Su poder gelificante es inferior a los anteriores dos tipos de gelatina y al ser la más comercial, podemos encontrarla en varios colores y con distintos sabores a frutas.

Proceso de elaboración de la gelatina
El proceso de elaboración de la gelatina de origen animal es sencillo a pesar de incluir ácidos y tecnicismos como hidrólisis en su explicación. No os preocupéis, que lo hemos simplificado mucho para poder entender bien cómo se consigue la gelatina.
Los pasos del proceso de producción de la gelatina
De manera sencilla para poder entenderlo sin mayores complicaciones, se puede decir que para extraer el colágeno se tritura el material de origen animal que os hemos mencionado antes.
Se utiliza un ácido para separar las moléculas interesadas y se libran así las proteínas de colágeno.
Esta reacción se conoce como hidrólisis, que es precisamente una reacción química que provoca la ruptura de los enlaces moleculares y así se puedan separar y extraer posteriormente.
Una vez la proteína liberada, se hierve para que se rompa y su composición química cambie para dar comienzo a la formación de la gelatina que ya nosotros conocemos.
De manera común, la composición suele repartirse en un 80 % de corteza de cerdo, un 15 % de capa media de la piel del ganado bovino y el 5 % restante de huesos de varios animales como el cerdo, vacuno, ave y pescado.
Beneficios y usos de la gelatina
La gelatina es un alimento muy versátil en la cocina que popularmente relacionamos más con el mundo de los postres. No obstante, también es utilizada en muchos platos principales como espesante, estabilizador y emulsionante.
Como os decíamos al principio del artículo, la gelatina no sólo propia de la cocina, sino que también es muy recurrida en el ámbito de la belleza incluyéndolo en producto para el cuidado de nuestra piel y el cabello.
Es así como el uso de la gelatina se extiende desde las golosinas, salsas y cremas, entre muchos otros, hasta el revestimiento de comprimidos y cápsulas médicas y productos cosméticos para el cuidado del pelo y la piel.

Se trata de un alimento realmente interesante para consumir con regularidad por todos los beneficios que nos aporta. Y es que, ¿alguna vez os habéis fijado que en la mayoría de los hospitales uno de los alimentos más comunes es la gelatina?
¡Estos son sus beneficios más populares!
- Saludable al ser una proteína pura al elaborarse con colágeno .
- Fortalece las articulaciones gracias también a su contenido de selenio, cobre y fósforo.
- Ayuda a la cicatrización de las heridas externas como cortes.
- Favorece la elasticidad de la piel y mejora su salud al aportar un 30% de colágeno.
- Muy bajo contenido de azúcar, colesterol y grasas.
- Favorece la digestión, además de regular las hormonas y potenciar el sistema inmunológico.