Anacardos crudos: ¿Por qué no se venden estos frutos secos crudos?
Anacardos crudos o tostados

Los frutos secos son un alimento de consumo diario recomendado por varias instituciones, tal y como veremos más adelante, junto con sus propiedades.
Sus beneficios para nuestra salud son, aunque diferentes según el tipo de fruto seco, muy parecidos entre sí, como el hecho de que regulen de los niveles de colesterol de forma casi general, por ejemplo.
Además de no tomar más que un puñado al día, entre las recomendaciones más repetidas encontramos el de consumir los frutos secos al natural, mejor que tostados, con sal, azúcar o algún otro aditivo.
Los frutos secos al natural son más saludables, con una excepción: los anacardos.
Propiedades de los anacardos
Lo anacardos, más allá de ser uno de los frutos secos más valorados por su sabor, también son una fuente de lo más interesante de nutrientes y beneficios para nuestra salud.
La OMS recomienda su consumo, así como desde la Organización de Consumidores y usuarios (OCU) no recomiendan comer más de 30 gramos de frutos secos al día, lo que se traduce a una media de entre 15 y 18 anacardos (dependiendo del tamaño) diarios.
Entre sus propiedades y beneficios más interesantes destacamos:
- Ayuda a disminuir los niveles de colesterol malo (LDL) y triglicéridos
- Aumenta los niveles de colesterol bueno (HDL)
- Tiene un alto contenido en fibra, grasas saludables y proteínas (mayor sensación de saciedad)
- Protege el sistema cardiovascular
- Favorece el buen funcionamiento del sistema nervioso.
- Es rico en minerales como el magnesio y el cobre (imprescindibles para la regeneración de tejidos y el correcto funcionamiento del sistema inmune).
- Es rico en triptófano: uno de los aminoácidos esenciales precursor de nutrientes y vitaminas esenciales responsables de mejorar nuestro estado de ánimo y mejorar el buen descanso.
¿Es malo el anacardo crudo?
Se da el caso con los anacardos de que en los supermercados los encontramos indicados como naturales e, incluso, crudos, pero lejos de la realidad, todos los anacardos que compramos y consumimos han sido previamente tostados o fritos. Y esto, ¿por qué?
Resulta que al recolectar los anacardos y abrir su cáscara, el fruto segrega un aceite conocido como CNSL, un líquido viscoso de color marrón oscuro que se obtiene de la cáscara de los anacardos únicamente y que resulta una de las principales fuentes de fenoles de origen vegetal.

El aceite fenólico que contiene la cáscara en la que crece el anacardo es una sustancia no saludable y peligrosa que se utiliza en algunas industrias como en materiales de fricción, recubrimientos, adhesivos, aislamientos y más. Puede incluso producir quemaduras.
Los anacardos se recolectan y se tuestas, por lo que no suele haber peligro cuando lo vemos «en crudo» en el supermercado, ya que no es habitual encontrarlo en ese estado más allá de en la plantación.
El excesivo consumo de anacardos crudos puede provocar malestar del aparato digestivo, inflamación, heridas y, en el peor de los casos, incluso puede resultar fatal. Tostándolos se prevé cualquier riesgo para con nuestra salud.
¿De dónde salen los anacardos?
El árbol del anacardo es uno de los más curiosos al dar el fruto seco y la fruta fresca al mismo tiempo. Se considera un pseudofruto y es llamado «mazana de anacardo».
Solo hay un anacardo por fruta y su recolecta resulta dificultosa al tener que hacerlo de uno en uno. Diferenciamos dos las dos partes en esta pseudofruta:
Por una parte, tenemos la fruta fresca que la entendemos así por su textura carnosa. Se trata de un falso fruto, tal y como se entiende en el ámbito de la botánica, y es conocido por el nombre de manzana de anacardo o cajú.
Ésta contiene una pulpa jugosa de sabor ligeramente ácido. A pesar de poder consumirse como fruta fresca, no es lo común y no se suele comercializarse como tal, sino que se destina a preparaciones como mermeladas, licores y zumos, aun sin ser relevante para su cultivo, es más un agregado a éste.
Por otra parte, tenemos el propio anacardo, el que se considera el verdadero fruto del árbol. Es conocido como nuez de anacardo y es fácilmente reconocible por su forma de riñón.
El anacardo se encuentra pegada al extremo inferior de la manzana o fruta. Te dejamos una imagen para que puedas ver la forma tan curiosa en la que crece.

Esta parte, la del anacardo, es realmente la parte que se produce para comercializar de la planta y la que nosotras conocemos y comemos. De hecho, la fruta fresca es más bien desconocida.
Si queréis saber más sobre esta planta y os interesa incluso el cómo cultivarla vosotras mismas, podéis encontrar mucha más información en Jardinatis, en su artículo: ¿Cómo cultivar un anacardo en tu jardín? Todo lo que debes saber.
¿Cuánto tarda en dar fruto el árbol del anacardo?
El árbol del anacardo alcanza su madurez y, por tanto, el momento de comenzar a producir las frutas a los tres o cinco años. No obstante, no es hasta los ocho años que la planta alcanza su mayor productividad.
Estos tiempos y el laborioso trabajo que conlleva su recolecta se ven reflejados en los precios algo elevados de los anacardos.