Bizcocho de yogur esponjoso

El bizcocho de yogur es uno de los postres más tradicionales y uno de los preferidos. Con esta receta te quedará un bizcocho muy esponjoso que podrás servir directamente o utilizarlo como base para otros postres y tartas.
Esta receta de bizcocho de yogur también es conocida como Bizcocho 1-2-3 por la peculiaridad de sus medidas. No necesitas una báscula para medir las cantidades de los ingredientes, ya que se utiliza el envase del yogur como referencia, poniendo 1 medida de aceite de oliva, 2 de azúcar y 3 de harina.
El bizcocho es un postre ideal para preparar con los niños y que se inicien en la cocina. Les encantará mezclar los ingredientes y ver cómo crece la masa en el horno.
Índice de contenidos
Ingredientes

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1 yogur natural
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3 huevos
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1 limón
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harina (3 medidas de yogur)
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azúcar (2 medidas de yogur)
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aceite de oliva (1 medida del envase de yogur)
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16 gramos de levadura química
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aceite (para engrasar el molde)
Raciones
8
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
50 m
Tiempo total
60 m
Informacion nutricional
Valor nutricional (*por ración)
Cantidad | % | |
---|---|---|
Energía | 482 kcal | 24,1% |
Proteína | 6 g | 8% |
Hidratos de carbono | 66 g | 24% |
Azúcares | 32 g | 64% |
Grasa total | 21 g | 26,87% |
Grasa saturada | 6 g | 32,81% |
Grasa polisaturada | 2 g | 18,18% |
Grasa monosaturada | 13 g | 29,55% |
Colesterol | 50 mg | 16,67% |
Fibra | 2 g | 6,67% |
Sal | 0,64 g | 12,8% |
Sodio | 257 g | 12,85% |
Calcio | 55 mg | 4,58% |
Yodo | 5 mcg | 3,33% |
Hierro (hombres) | 1 mg | 10% |
Hierro (mujeres) | 1 mg | 10% |
Alérgenos



Elaboración
Pon el yogur en un bol y reserva el envase vacío.
Lava bien el limón, ralla la piel y exprímelo. Añade la ralladura de limón y el zumo al bol del yogur.
Agrega también los huevos y bate todo con las varillas. Añade la levadura química al bol y mezcla todo.
Utiliza el envase vacío del yogur para medir el resto de ingredientes. Agrega al bol la harina (3 medidas del envase de yogur) mientras remueves la mezcla.
A continuación, añade el azúcar (2 medidas del envase de yogur) y vuelve a remover.
Agrega el aceite de oliva (1 medida del envase) y remueve. Bate todo de nuevo con las varillas hasta que se integre y no queden grumos.
Puedes añadir diferentes ingredientes de tu gusto a la masa (antes de hornearla): frutos secos, chocolate o cacao en polvo, coco rallado, ralladura de piel de naranja, fruta... Recuerda que todo debe estar troceado y mezclado con la masa.
Vierte la masa en un molde apto para el horno previamente untado con aceite y espolvoreado con harina (asegúrate de retirar la harina sobrante).
Introduce en el horno precalentado a 180ºC unos 50 minutos, hasta que el bizcocho esté hecho.
Saca el bizcocho del horno, déjalo reposar unos minutos y desmóldalo con cuidado.
Es normal que el bizcocho se agriete en la superficie. Eso se debe a que ha salido la humedad al cocerse y, por lo tanto, el bizcocho está bien hecho.
Sirve el bizcocho de yogur junto con un café o chocolate caliente ¡ya disfrutar!
Paso a paso
Mezcla el yogur, la ralladura y el zumo del limón y los huevos en un bol. Agrega la levadura, la harina e integra. Añade el azúcar y el aceite.

Engrasa con aceite y enharina un molde para horno. Rellena con la masa y hornea 50 minutos a 180 grados centígrados.

Sirve el bizcocho de yogur esponjoso ¡y a disfrutar!

Consejos y trucos
Es importante que no abras el horno mientras el bizcocho de yogur se está cociendo. De lo contrario, la masa podría bajarse.
Para saber si el bizcocho está hecho, pínchalo con un palillo y si sale limpio, estará listo. Si se le quedan restos pegados, déjalo unos minutos más en el horno.
Puedes reemplazar el yogur natural por yogur de limón para darle otro toque a tu receta.
Este bizcocho se puede servir para acompañar el desayuno o la merienda o utilizarlo como base para preparar tartas y otros postres, como la tarta de cumpleaños. En este caso, te recomendamos cortar la parte superior del bizcocho de manera que quede lisa y puedas montar bien la tarta.
Para conservar el bizcocho tierno durante más tiempo, espera a que se enfríe por completo y mételo en un recipiente hermético ajustado a su tamaño.
También puedes congelarlo (si no tiene ningún relleno ni glaseado) envuelto en papel film transparente o en bolsas de cierre hermético. Cuando quieras consumirlo, déjalo en el frigorífico durante toda la noche para que se descongele lentamente.
Si el bizcocho se ha quedado duro después de un tiempo, ¡no lo tires! Puedes aprovecharlo para preparar un delicioso pan de calatrava, un pudin de chocolate o unos divertidos cake pops de renos.