¿Se pueden congelar los higos? Trucos para conservarlos todo el año

Y como cada año, con el final del verano y el principio del otoño debemos decir adiós a la temporada de los higos. Su temporada es tan breve que siempre nos quedamos con ganas de más, incluso cuando somos conscientes que ya no está en el mercado y debemos esperar toooodo un año hasta su vuelta.

Desde la antigüedad se han buscado métodos de conservación para este y otros alimentos, de manera que podamos disfrutar de ellos incluso cuando ya no hay cosecha. Hemos probado la mermelada de higos, así como los higos secos, pero ¿existe alguna manera de poder disfrutarlos de manera más fresca? ¡Pues tenemos buenas noticias!

Los higos pueden congelarse fácilmente con unos trucos muy sencillos para que no pierdan su dulzura y la mayor parte de su textura tan característica durante el proceso. Por lo que, la respuesta a si existe una manera de mantenerlos en una versión más fresca durante todo el año es sí, pero hay saber cómo para hacerlo de la manera correcta y evitar, ante todo, que se estropeen.

Tranquila, que congelar higos es más fácil de lo que parece y quedarán genial una vez descongelados para hacer recetas dulces y saladas incluso en pleno invierno o primavera. Te explicamos cómo congelarlos paso a paso y qué trucos te ayudarán a aprovecharlos al máximo.

Cómo congelar higos frescos correctamente

Si quieres que tus higos conserven el sabor y la mayor parte de su textura, es importante prepararlos antes de meterlos al congelador. ¡Toma buena nota que esto marcará la diferencia!

Paso a paso para congelarlos enteros o partidos

1. Lava los higos suavemente con agua fría y sécalos bien con papel de cocina. Importante secarlos bien para que no se cristalicen.
2. Decide si prefieres congelarlos enteros (ideales para repostería) o partidos por la mitad (perfectos para usar en batidos y mermeladas).
3. Colócalos en una bandeja, sin que se toquen entre sí, y mételos en el congelador durante 2-3 horas.
4. Cuando ya estén duros, ya podrás guardarlos en bolsas herméticas o recipientes aptos para congelación.

El congelarlos primera en una bandeja en la que no se toquen es esencial para evitar que se peguen entre sí. De esta forma, podrás coger solo los que necesites en cada ocasión sin necesidad de tener que descongelar todos.

Trucos para que no pierdan sabor ni color

Es inevitable que al congelar los higos cambien ligeramente de textura, ya que, al ser una fruta con tanta agua, al descongelarse la pulpa suele quedar más blanda, al estilo de una compota. No obstante, ¡con algunos trucos conseguimos que se conserven mejor!

• Añade unas gotas de limón antes de congelarlos, así evitarás que se oxiden y se oscurezcan.
• Si los quieres para hacer postres más tarde, espolvoréalos con un poco de azúcar antes de congelar. De esta manera, al descongelarlos mantendrán mejor la jugosidad.
• No los guardes más de 10-12 meses, ya que con el tiempo van perdiendo aroma.
• El sabor y dulzor se mantienen generalmente bien, sobre todo si estaban en su punto óptimo de maduración en el momento de congelarlos.
• Los higos descongelados no serán tan agradables de comer como un higo fresco recién cogido, pero funcionan genial con yogur, queso fresco, requesón o incluso sobre una tostada.

Cómo usar los higos después de congelar

Aunque los higos congelados no son los mejores para comer tal cual, al natural, sí que resultan perfectos para preparar una gran variedad de recetas ¡dulces y saladas!

• En batidos: Combina higos directamente congelados con plátano y yogur para un smoothie cremoso.
• En repostería: Úsalos en bizcochos, brownies o tartas. Con su dulzor natural quedarán deliciosos.
• En salsas saladas: Acompáñalos con vinagre balsámico y cebolla para una guarnición deliciosa. Con carne o en ensaladas, queda espectacular.
• En mermeladas exprés: Tan sencillo como cocerlos directamente congelados con un poco de azúcar y limón para tener una mermelada de higos casera lista.

Consejos extra para conservarlos mejor

El mejor consejo que te podemos dar es que pienses bien antes de congelar los higos para qué los vas a usar. Y es que esto, precisamente, te ayudará a elegir el formato más adecuado en los que deberás congelarlos:

• Enteros si quieres usarlos para postres de horno o rellenos.
• Por la mitad serán perfectos para utilizar en batidos o hacer mermeladas rápidas.
• Triturados: Guárdalos directamente en forma de puré y así los tendrás listos para hacer salsas o helados caseros.

De esta manera tan sencilla, además de ahorrar tiempo, también tendrás la oportunidad de aprovechar al máximo cada pieza de fruta.