Roscos fritos esponjosos y fáciles

24 ago 2024 - 13:30 Actualizado: 16 abr 2025 - 13:52
Roscos fritos
Roscos fritos | Sofía de la Torre

Los roscos fritos, también conocidos como rosquillas o rosquillos según la región, son un clásico de la repostería tradicional.

Estos dulces caseros tienen una gran variedad de nombres y variantes, adaptándose a los ingredientes disponibles y a los gustos locales. Por ejemplo, el aceite puede aromatizarse con piel de limón, piel de naranja o incluso una rama de canela y el licor de anís, aunque opcional, es un añadido popular.

Aunque los roscos fritos son una receta típica de Semana Santa, son perfectos para disfrutar en cualquier época del año. No hay nada como el placer de un desayuno o una merienda con estos dulces, cuya preparación puede convertirse en una actividad familiar entrañable. El aroma de los roscos friéndose, que llena la casa de recuerdos y calidez, es inconfundible.

En nuestra receta, hemos ajustado las medidas tradicionales para que puedas lograr resultados consistentes y deliciosos cada vez. Así, podrás disfrutar de unos roscos fritos perfectos, crujientes por fuera y tiernos por dentro, ideales para acompañar con un buen café o chocolate caliente.

Ingredientes

Ingredientes de roscos fritos
Ingredientes de roscos fritos | Sofía de la Torre
  • ·

    1/2 limón

  • ·

    4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

  • ·

    2 huevo

  • ·

    4 cucharadas de azúcar

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    4 cucharadas de leche

  • ·

    1 cucharada de licor de anís

  • ·

    320 gramos de harina

  • ·

    15 gramos de impulsor químico

  • ·

    aceite de oliva para freír

  • ·

    100 gramos de azúcar para rebozar

  • ·

    1/2 cucharadita de canela para rebozar

Raciones

12

Coste

Bajo

Dificultad

Fácil

Preparación

30 m

Cocinado

30 m

Tiempo total

60 m

Informacion nutricional

Valor nutricional (*por ración)

Cantidad %
Energía 270,96 kcal 13,55%
Proteína 3,86 g 5,15%
Hidratos de carbono 33,58 g 12,21%
Azúcares 10,49 g 20,98%
Grasa total 11,68 g 14,95%
Grasa saturada 1,56 g 8,53%
Grasa polisaturada 1,29 g 11,73%
Grasa monosaturada 6,79 g 15,43%
Colesterol 41 mg 13,67%
Fibra 1,05 g 3,5%
Sal 2,1 g 42%
Sodio 0,16 g 0,01%
Calcio 15,25 mg 1,27%
Yodo 2,25 mcg 1,5%
Hierro (hombres) 1,52 mg 15,2%
Hierro (mujeres) 1,52 mg 8,44%

Valores nutricionales calculados por Dietista-Nutricionista

Alérgenos

Eggs.png Huevos
Milk.png Leche
Gluten.png Gluten

Paso a paso

El primer paso para elaborar la masa de los roscos es aromatizar el aceite. Para ello, corta la piel de medio limón con cuidado de no llevarte la parte blanca, que es amarga.

Calienta 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra en una sartén a fuego suave. Fríe la piel del limón durante un par de minutos, asegurándote de que el aceite no llegue a humear. El objetivo es que el limón libere sus aceites y aromatice el aceite.

En un bol grande, casca 2 huevos a temperatura ambiente y añade 4 cucharadas de azúcar. Bate bien los huevos con el azúcar. Luego, incorpora 4 cucharadas de leche y 1 cucharada de licor de anís, seguido del aceite aromatizado y colado. Bate hasta que todos los ingredientes líquidos estén bien integrados.

Por último, añade 320 gramos de harina tamizada junto con 15 gramo de impulsor químico. Mezcla hasta obtener una masa que se desprenda de las paredes del bol. Si es necesario, añade un poco más de harina.

Vuelca la masa sobre una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta que tenga aproximadamente 1 cm de grosor. Usa un cortador de roscos para cortar 12 porciones.

Si no tienes un cortador específico, puedes usar un cortador redondo grande y otro más pequeño para hacer el agujero central.

Prepara un plato hondo con papel absorbente y otro con 100 g de azúcar mezclada con 1/2 cucharadita de canela en polvo. Reserva ambos platos.

Para la fritura, calienta abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén. Para comprobar la temperatura, pon un poco de masa en el aceite; debe flotar en unos 5 segundos.

Haz un corte superficial en cada rosco a lo largo del diámetro sin llegar al final. Fríe los roscos en tandas, dándoles la vuelta cuando doren, por un lado.

Coloca los roscos fritos primero en el plato con papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Luego, pásalos por el plato con azúcar y canela, cubriéndolos bien.

Ya tienes unos deliciosos roscos fritos, perfectos para disfrutar con un café, en la merienda o el desayuno. Son ideales para cualquier ocasión especial o para fechas señaladas como la Semana Santa.

1

Para aromatizar el aceite, calienta 4 cucharadas de aceite a fuego suave y fríe la piel del limón 2 minutos, sin que llegue a humear.

Infusionamos el aceite con piel de limón
Infusionamos el aceite con piel de limón | Sofía de la Torre
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Bate los huevos con el azúcar. Añade la leche, el licor de anís y el aceite aromatizado colado. Bate. Tamiza la harina y el impulsor químico. Mezcla.

Preparamos la masa de los roscos
Preparamos la masa de los roscos | Sofía de la Torre
3

Pasa la masa a una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta tener 1 cm de grosor. Corta 12 porciones con un cortador de roscos.

Cortador de roscos
Cortador de roscos | Sofía de la Torre
4

Haz un corte superficial en cada rosco a lo largo del diámetro sin llegar al final. Dora los roscos en abundante aceite. Retira sobre papel absorbente.

Realizamos un corte superficial en los roscos
Realizamos un corte superficial en los roscos | Sofía de la Torre
5

Pasa los roscos fritos todavía calientes por el azúcar mezclado con la canela cubriéndolos bien.

Roscos fritos esponjosos
Roscos fritos esponjosos | Sofía de la Torre

Consejos y trucos

Los roscos fritos están en su punto máximo de sabor y textura cuando se comen el mismo día de su elaboración. Sin embargo, si no puedes consumirlos todos en el mismo día, guárdalos en un recipiente hermético para mantener su frescura. De esta forma, se conservarán bien por uno o dos días más.

Esta receta es una de esas joyas que se transmiten de generación en generación. Antiguamente, las cantidades se medían en función de los huevos: por cada huevo se usaban dos medidas de leche, aceite y azúcar y la harina era la que aceptara la masa.

En nuestra versión, respetamos esta tradición, pero proporcionamos cantidades más precisas para facilitar la preparación. Utilizamos cucharadas para los líquidos y gramos exactos para la harina y la levadura, aunque es posible que se necesite un poco más de harina, dependiendo del tamaño de los huevos.

Puedes darles un toque único a tus roscos fritos añadiendo otros ingredientes aromáticos. Incorpora ralladura de limón o naranja a la masa para un sabor cítrico al estilo de las rosquillas de naranja. También puedes añadir una pizca de extracto de vainilla para un aroma dulce y suave. Estas variaciones pueden darle un giro especial a la receta tradicional.

Para obtener roscos fritos perfectos, es crucial mantener la temperatura del aceite entre 170°C y 180°C. Si el aceite está demasiado caliente, los roscos se dorarán por fuera, pero quedarán crudos por dentro. Si está demasiado frío, absorberán demasiado aceite y quedarán grasientos. Usa un termómetro de cocina para asegurarte de que el aceite está en la temperatura correcta.

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