Gambas a la gabardina, consigue el rebozado perfecto

Las gambas a la gabardina son una tapa clásica de bares y restaurantes que ahora puedes preparar fácilmente en casa con nuestra receta.
Gabardina es el nombre que recibe el rebozado que envuelve a las gambas, creando una capa crujiente por fuera mientras que la gamba se mantiene jugosa por dentro, siempre que sigamos los tiempos y la temperatura adecuada de fritura.
Perfectas para cualquier ocasión, estas gambas se sirven tradicionalmente con unas rodajas de limón y un toque de salsa tártara, que potencia su sabor y las convierte en un auténtico placer.
Índice de contenidos
Ingredientes

-
500 gramos de gambas grandes
-
100 gramos de harina de trigo
-
100 gramos de maicena (harina de maíz refinada)
-
120 mililitros de cerveza fría
-
1/2 cucharadita de cúrcuma o colorante alimenticio
-
sal
-
pimienta negra molida
-
aceite de oliva para freír
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
15 m
Cocinado
5 m
Tiempo total
20 m
Informacion nutricional
Valor nutricional (*por ración)
Cantidad | % | |
---|---|---|
Energía | 371,28 kcal | 18,56% |
Proteína | 25,51 g | 34,01% |
Hidratos de carbono | 40,12 g | 14,59% |
Azúcares | 0,15 g | 0,3% |
Grasa total | 12,29 g | 15,73% |
Grasa saturada | 1,46 g | 7,99% |
Grasa polisaturada | 1,81 g | 16,45% |
Grasa monosaturada | 6,74 g | 15,32% |
Colesterol | 150 mg | 50% |
Fibra | 3,27 g | 10,9% |
Sal | 1,9 g | 38% |
Sodio | 1,43 g | 0,07% |
Calcio | 128,27 mg | 10,69% |
Yodo | 110,25 mcg | 73,5% |
Hierro (hombres) | 3,87 mg | 38,7% |
Hierro (mujeres) | 3,87 mg | 21,5% |
Alérgenos



Paso a paso
Empieza por retirar las cabezas de 500 gramos de gambas grandes. Luego pela las gambas, dejando la cola intacta para facilitar su manejo al rebozarlas y freírlas. Retira el hilo intestinal de las gambas tirando suavemente. Lava las gambas y sécalas bien con papel absorbente.
Sazona las gambas con sal en ambos lados, y añade un poco de pimienta en uno de ellos para realzar el sabor.
Prepara la masa del rebozado. En un bol, mezcla 200 gramos de harina, utilizando una combinación de harina de trigo y harina de maíz tipo Maicena. Añade 1/2 cucharadita de cúrcuma o colorante alimenticio para darles un color dorado atractivo. Vierte 120 ml de cerveza muy fría sobre las harinas y bate hasta obtener una pasta suave y sin grumos.
Sumerge las gambas, una a una, en la masa de rebozado. Fríelas en tandas para evitar que la temperatura del aceite baje.
Calienta abundante aceite de oliva en una sartén, asegurándote de que la temperatura se mantiene entre 170 y 180ºC para una fritura perfecta.
Una vez doradas, retira las gambas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Sirve las gambas a la gabardina recién hechas, acompañadas de limón y salsa tártara para una experiencia deliciosa.
Pela las gambas dejando la cola intacta. Retira el hilo intestinal. Lava con agua y seca con papel absorbente.

Sazona las gambas con sal por ambos lados y pimienta por uno de ellos.

Para la masa del rebozado mezcla ambas harinas con la cúrcuma y la cerveza. Suave hasta tener una pasta suave y sin grumos.

Sumerge las gambas de una a una en la masa dejando la cola fuera.

Fríe en tandas en aceite caliente a 170-180ºC. Retira sobre papel absorbente.

Sirve las gambas a la gabardina recién hechas acompañadas de limón y salsa tártara.

Consejos y trucos
Puedes hacer esta receta no solo con gambas, sino también con gambones o langostinos, que añadirán un toque más sabroso y carnoso a la tapa.
Usa agua con gas o cerveza muy frías al preparar la masa. Ambas opciones garantizan un rebozado crujiente, ya que el contraste de temperatura ayuda a formar burbujas en la masa durante la fritura.
Para darle un toque más atractivo a la masa, añade un poco de colorante alimentario o azafrán. Esto no solo hará que las gambas a la gabardina tengan un color dorado intenso, sino que también les aportará un sutil sabor.
Al preparar la masa del rebozado, llamada Orly, puedes experimentar con la adición de huevo. Puedes usarlo entero, solo la yema, o incluso solo la clara, dependiendo de la textura que prefieras. Esto afecta tanto el color como la consistencia del rebozado.
Si prefieres una masa más esponjosa y menos crujiente, añade una cucharadita de levadura en polvo. Esto hará que el rebozado tenga un aspecto más voluminoso, aunque con una textura más suave, ideal para quienes disfrutan de una gabardina más ligera.
Para un rebozado aún más crujiente, hemos usado una combinación de distintas harinas. Mezcla la mitad de harina de trigo con la otra mitad de harina de maíz tipo maicena. Esta combinación da como resultado una gabardina más ligera y crujiente, que envuelve las gambas a la perfección.