Tipos de sandía: variedades, sabores y trucos para elegir bien
Curiosidades
Descubre los tipos de sandía más comunes, cómo diferenciarlas, cuál es más dulce y qué tener en cuenta a la hora de elegirlas. ¡Guía completa sobre las sandías!

¿Sabías que existen decenas de tipos de sandía? Aunque a simple vista resulten muy parecidas, existen muchas variedades que suelen diferenciarse y clasificarse según su tamaño, color de la piel, color de la pulpa y el sabor. Algunas son más dulces, otras sin pepitas y también las hay de tamaño mini para neveras pequeñas.
Conocer los distintos tipos de sandía te ayudará a elegir la que más te guste o la que mejor encaje en la receta que estés pensando hacer. No es lo mismo preparar una ensalada fresca que buscar una sandía para tomar a cucharadas, por ejemplo.
Descubre las variedades más comunes de sandía que puedes encontrar en los mercados españoles, cómo diferenciarlas y qué características tiene cada una.
¿Cuántos tipos de sandía existen?
La sandía es una fruta originaria de África, aunque hoy en día se cultiva en todo el mundo. Existen decenas de variedades, aunque no todas se cultivan ni se comercializan a gran escala.
Estas variedades se clasifican principalmente en función del color de la pulpa (roja, amarilla o naranja), la presencia o ausencia de semillas, el tamaño, la forma o el tipo de piel (rayada, lisa y oscura o reticulada o moteada). Veamos las más destacadas.
Aunque el número total puede supera el millar, en la práctica, en los supermercados y fruterías españolas encontramos entre 6 y 10 tipos de sandía (sin darnos cuenta siquiera): Sandía con semillas, sandía sin semillas, sandía negra, sandía rayada, mini sandía, sandía amarilla y sandía piel moteada (menos común).
Sandía con semillas
Este es el tipo de sandía que todas conocemos y consideramos la normal: grande, con forma ovalada y llena de pepitas negras.

Características principales de la sandía con semillas:
- Pulpa muy jugosa y dulce.
- Presencia de semillas negras o marrones.
- Piel verde oscura, lisa o con rayas claras.
- Suelen pesar entre 4 y 8 kilos.
Aunque las semillas pueden resultar incómodas, es una de las variedades con más sabor. Perfecta para cortar en rodajas y disfrutar bien fría en los días de calor.
Sandía sin pepitas
La sandía sin pepitas es cada vez más popular, especialmente entre los más pequeños y quienes prefieren comer sandía sin tener que estar apartando las semillas.
Este tipo de sandía es el resultado de un cruce natural entre variedades con diferente número de cromosomas. No son transgénicas ni artificiales como popularmente se cree.

- Más cómoda para comer o cocinar.
- Dulce y crujiente, con textura firme.
- Ideal para zumos, batidos o cortar en cubitos.
Sandía mini
Las mini sandías se han vuelto especialmente populares en hogares pequeños o para personas que viven solas. Son igual de dulces, ¡pero más manejables!

Características de las mini sandías:
- Tamaño entre 1,5 y 3 kilos.
- Disponibles con o sin semillas.
- Más fáciles de almacenar y refrigerar.
- Suelen tener un sabor muy concentrado.
Perfectas para picar entre horas, para picnics o simplemente si no quieres cargar con una sandía enorme del mercado. En caso de ser pocos en casa o comprarla para una única persona, es de lo más práctica también al no tener que empacharte de sandía una vez abierta para que no se ponga mala.
Sandía rayada (la más común en España)
Esta es la sandía más cultivada en España. Las podemos encontrar en la mayoría de las fruterías con su característica piel de rayas verdes claras y oscuras.
La mayoría proviene de regiones como Murcia, Almería, Valencia o Castilla-La Mancha.

- Sabor equilibrado y refrescante.
- Textura firme, con buena cantidad de agua.
- Apta tanto para postre como para ensaladas.
Sandía negra
Esta variedad de sandía es muy llamativa por fuera al tener una piel de color verde muy oscuro, casi negro, y una pulpa de un rojo intenso.

Entre sus características:
- Alto contenido en azúcar natural, por lo que es especialmente dulce.
- Muy jugosa y con textura suave.
- Se cultiva en España, especialmente en zonas cálidas.
Es una de las favoritas entre quienes buscan una sandía bien dulce. Excelente para comer sola o en zumos.
Sandía amarilla
Su piel es similar a la clásica, pero su pulpa, en lugar de roja, ¡es amarilla! Sabe muy parecida a la roja, aunque algunas notan un toque más afrutado en esta variedad. Es poco habitual, pero muy vistosa si queremos probar algo diferente.

Características de la sandía amarilla:
- Sabor dulce, con un matiz más afrutado o tropical.
- Textura muy jugosa y refrescante.
- Disponible con o sin semillas, aunque es menos común esta última.
- Suele encontrarse en mercados gourmet o ecológicos.
- Su color la hace una opción perfecta para ensaladas, mesas veraniegas o postres vistosos. Es ideal para quienes buscan algo diferente sin renunciar al sabor clásico.
Sandía cuadrada
¡Esta sandía seguro que la has visto por la tele o redes sociales! No es su forma natural, si no que se cultiva en moldes en países como Japón. No cambia el sabor, pero llama mucho la atención por su forma. Se utiliza más como elemento decorativo o regalo gourmet que como un alimento para el día a día.
Características de esta singular sandía:
- Se cultiva en moldes cúbicos mientras la fruta crece.
- Sabor igual al de una sandía convencional.
- Piel uniforme y resistente.
- Se utiliza principalmente como objeto decorativo o regalo de lujo (no es barata, pueden llegar a venderse por ¡150 euros!).
Aunque no se cultiva con fines de consumo masivo, su estética la hace muy popular en mercados exclusivos o como elemento de diseño gastronómico.
Sandía Orangeglo
Esta variedad es muy poco común en España. De hecho, se suele cultivar bajo reserva y demanda al ser popular especialmente entre coleccionistas y amantes de frutas especiales.

Características:
- Pulpa de color naranja intenso.
- Sabor muy dulce con un ligero toque cítrico con cierta similitud a frutas tropicales.
- Cáscara verde claro con vetas alargadas.
- Su tamaño suele rondar los 5 a 8 kilos.
Aunque no es fácil de encontrar en mercados convencionales, algunos productores especializados o huertos ecológicos la cultivan bajo pedido.