¿Cómo saber si una miel es 100% natural? ¡Trucos sencillos y rápidos para comprobar su calidad!
Cómo saber si la miel de abeja es natural

La miel es un alimento conocido no sólo como uno de los mejores endulzantes naturales, sino que también ha pasado de generación en generación como uno de los agentes antibióticos más recurridos. Es usada como antiinflamatorio, antioxidante y agente antibiótico, así como es también muy interesante por su contenido de vitaminas y minerales.
No obstante, a veces cuesta distinguir una miel de calidad y pura de una adulterada. Es así como un estudio realizado por el director del Laboratorio de Investigación en Palinología de la Universidad de Texas A&M (Estados Unidos), Vaughn Bryant, advirtió de que «más del 75% de la miel que se comercializa está adulterada».
Se suele añadir aditivos como glucosa o agua a las mieles puras con objeto de que no se solidifiquen con el tiempo y sean más sencillas de manipular en casa.
Si tienes dudas o, simplemente, quieres comprobar la calidad de tu miel, atenta a las siguientes pruebas. Descubre si la miel es 100% natural según su textura y algunas sencillas técnicas para detectar la cantidad de agua en ella. ¡Solo os llevará unos pocos segundos!
Cómo saber si la miel es natural y no adulterada
Lo primero que tendremos que hacer será comprobar su etiqueta, en la que echaremos un vistazo a sus componentes. Si encontramos el jarabe de alta fructosa o glucosa comercial entre ellos, ¡mala señal! Se tratan de dos aditivos muy frecuentes en las mieles adulteradas para evitar que se solidifiquen.
Aun así, hay muchas veces que nos venden mieles como puras estando aligeradas con agua o al que han agregado algún otro aditivo para que resulte más atractiva. ¡Atentas a esta serie de trucos para comprobar su pureza!
La textura de la miel
La textura de la miel nos dará muchas pistas sobre la pureza de esta. Para ello, la ponemos a prueba de varias formas.
La textura al caer
La más sencilla de todas es tomar una cucharada de miel y colocarla bocabajo. Ahora bien, la velocidad con la que caiga será signo de su calidad. Si cae rápido significa que está húmeda y, por lo tanto, no es pura.
Las mieles de calidad y maduras se suelen quedan pegadas a la cuchara o su caída es más lenta.
La textura en el agua
Deja caer una cucharadita de miel a un vaso de agua, bien puedes introducirla directamente, no obstante, mejor si dejas caer la miel al vaso sin meter la cuchara.
Si la miel cae al fondo sin diluirse, de manera limpia, es que es miel pura y, al contrario, si la miel se disuelve es signo de que ha sido adulterada. Debe quedarse junta, como si fuera un sólido, al sumergirla en el agua.

¿Arde la miel?
Toma un poco de miel (poquita, por favor) en la punta de una cerilla o fósforo. Prende otra cerilla y acércala a la miel, ¿prende?
La miel pura prende y se quema, mientras que la adulterada, al contener agua, no arde. Curioso, ¿verdad? ;)
El truco de la servilleta
Otra manera de detectar una miel adulterada con demasiada agua es colocar unas gotas de la miel sobre una servilleta o papel absorbente.
¡Ahora atentas! Si la miel se mantiene compacta y no se absorbe por el papel significa que es pura. En caso de dejar una mancha húmeda o absorberse será signo del agua que contiene y su baja calidad.
El truco del pan
Igualmente, para detectar el agua en la miel, otro truco muy sencillo en cubrir un trozo de pan duro en miel. Espera 10 minutos y observa el pan. Si sigue duro es buena señal, significa que la miel es pura. Sin embargo, si el pan se ha ablandado es signo de que la miel tiene mucha agua.
Mueve la miel hasta que se cree el dibujo de un panal
Agrega una cucharadita de miel en el centro de un plato hondo y cubre con una capa fina de agua.
Mueve el plato con movimientos circulares, con energía. Sin manipular directamente la miel, sino que buscamos moverla con movimientos indirectos.
Si en la superficie de la miel se forman formas geométricas, al estilo de un panal, ¡buena señal! Significa que tu miel es de buena calidad.

Se dice que la miel tiene memoria y forma el dibujo de un panal, lejos de la realidad, sentimos romper la magia, tiene más que ver con la cantidad de humedad o falta de ella, más bien, en la miel.
Como hemos venido viendo en los trucos anteriores, una miel con mucha agua pierde la textura en el agua, mientras que una de calidad y pura se mantendrá unida.
Al removerla con los movimientos del plato, al ser de calidad no se diluirá, sino que dichos movimientos se verán reflejados en la superficie. Es tan espesa que no se moverá más que eso sin que la manipulemos directamente con una cuchara o la mano.
¿De qué color es la miel natural?
Hay quien se quiere basar en color de la miel para justificar su calidad, no obstante, venimos a desmontar este mito.
El color de la miel pura bien puede ser de tonos ámbar hasta un marrón oscuro. Esto depende de las flores utilizadas como fuente y del proceso de producción.
Generalmente, la miel clara tiene un sabor más suave y delicado, mientras que la oscura destaca por ser más intenso, robusto y pronunciado.